Toni Bou (Repsol Honda), firmó el pasado fin de semana en Andorra su cuarta victoria de temporada del Mundial de X-Trial (indoor), con la que conseguido distanciarse hasta los 25 puntos de su inmediato perseguidor, Jaime Busto (GasGas). Sin embargo, el campeonato no está decidido a falta de dos pruebas, la primera de ellas el X-Trial de Madrid, el 4 de noviembre, donde el piloto vasco, de 26 años, tiene una nueva oportunidad de acercarse al 33 veces campeón del mundo de Trial.
Bou sufrió en la última prueba y reconocía que, «los rivales están muy fuertes, como Jaime, que ha ganado la primera vuelta y Gabri (Marcelli, su compañero de equipo) que ganó la segunda. Los jóvenes aprietan mucho y he tenido que sacar mi mejor versión en la final para poder ganar en casa, que como en el Sant Jordi, es siempre muy importante. Han sido dos carreras de mucha presión sobre todo ésta, después del parón, donde he cometido fallos en la primera vuelta y donde hay que seguir puliendo cosas», comentaba el de Piera. Sabe que un momento de relajación puede costarle una derrota en el uno de los mundiales, por primera vez en los últimos 17 años.
Por su parte Jaime Busto, reconocía que Bou había estado «a un nivel increíble en la final, pero estoy contento con las sensaciones y el acoplamiento que tengo con la moto que está mejorando en cada prueba. La regularidad de estar siempre en el podio es importante y ahora sólo me resta intentar estar un poco más cerca de Toni», dice con la mirada puesta en el Madrid Arena, el 4 de noviembre a las 18.30 de la tarde, donde puede dar un golpe de mano que sería histórico.
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